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El Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud – CENS – trabaja en la conformación de un ecosistema local para impulsar innovaciones que serán testados en hospitales públicos.  

La interoperabilidad de los sistemas de salud en Chile podría reportar al país un ahorro de USD170 millones, como resultado de una mayor disponibilidad de información a los usuarios y a datos que faciliten una mejor toma de decisiones médicas, proyecta el Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud. La cifra es una estimación local de un estudio publicado por investigadores de la Universidad de Harvard, que calcula que la interoperabilidad completa de los sistemas tiene un impacto del 5% en contención de costos para la salud de un país.

Camilo Erazo, gerente general de CENS, detalla que, extrapolado a Chile, donde el gasto per cápita es de US$ 2 mil, el potencial máximo de eficiencia permitiría un ahorro cercano al 10% del gasto total, que es de US$1.700 millones. “Considerando que la interoperabilidad completa aún está lejos de alcanzarse en Chile, estimamos que podría en el corto plazo lograrse un ahorro del 10%. Los principales beneficios radican en una mayor disponibilidad de información acerca de los pacientes en el momento en que es necesaria, lo que facilita la toma de decisiones informadas”, agregó Erazo. 

Ecosistema para la interoperabilidad

CENS trabaja desde el año 2017 en la conformación de un grupo de desarrolladores de soluciones locales en interoperabilidad, y este año lanzó un torneo de emprendimiento (www.censtechallenge.cl) en el que académicos y actores de la industria de la salud ayudarán a que las mejores ideas de todo el país se adapten a resolver problemas del sistema sanitario local, contribuyendo a lograr ahorros.

Durante el año pasado, expertos internacionales mostraron experiencias de éxito en países como Holanda, Estados Unidos y Australia. El desarrollo de este ecosistema local es clave, en opinión de CENS, para que los progresivos ahorros en salud se transfieran al financiamiento de proyectos I+D tanto en el ámbito privado como el público. Por eso, el primer certamen para emprendimientos digitales en salud tiene un rol importante. 

“Lo que hace el torneo y otras iniciativas de colaboración entre actores públicos y privados es dar mayor certeza al proceso de desarrollo de soluciones tecnológicas, permitiendo a los emprendedores planificar mejor el futuro de su innovación, bajar el riesgo de sus proyectos y acceder más fácilmente a financiamiento”, explicó Erazo. 

El torneo CENS Tech Challenge seleccionará a un grupo de 30 ideas emprendedoras en salud digital, que serán orientados en un proceso de acompañamiento de seis meses. Luego de esto, las iniciativas de mayor impacto serán evaluadas en los centros de pilotaje del Ministerio de Salud en hospitales públicos de Coquimbo, Santiago y Concepción. 

El ejecutivo señaló que el certamen es una de las primeras instancias a nivel nacional para orientar a los emprendedores en salud digital respecto a dónde deben ir a buscar el financiamiento para sus ideas. “Estamos creando las condiciones para que ellos puedan tener la oportunidad de probar las ideas en escenarios reales y avanzar con claridad para probar las soluciones”, agregó Erazo.

Daniel Capurro, director de CENS, señaló que “el país destina entre el 8% y el 9% del PIB al año, entonces, cualquier iniciativa que vaya enfocada en hacer más eficiente el sistema de salud, tiene grandes posibilidades de tener financiamiento. Solo el tamaño del mercado hace que cualquier movimiento desde el punto de vista de la eficiencia genere una cantidad importante de recursos y debiera haber muchas instituciones interesadas en invertir en eso”.

Oportunidades en datos y pacientes crónicos

El torneo CENS Tech Challenge, apoyado por el Ministerio de Salud como parte de sus desafíos de innovación, busca aportar a un nuevo modelo de atención digital centrado en el paciente y sobre el que se construyen procesos de modernización de la gestión hospitalaria y la introducción de nuevas tecnologías en beneficio del usuario.

Algunas de las áreas en las que se buscan ideas innovadoras son la adherencia a tratamiento de pacientes crónicos; tratamientos personalizados; educación para la prevención de enfermedades. La empresa ITMS Telemedicina y la plataforma OpenBeauchef de la Universidad de Chile colaborarán con el desarrollo del torneo.

“Tenemos puestas tremendas expectativas sobre el impacto en que la interacción del mundo de la salud con el de la ingeniería y la tecnología pueden tener sobre la calidad de vida de las personas. Todo lo que se haga en esta dirección tiene un potencial enorme”, dijo James McPhee, vicedecano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile y director de OpenBeauchef. 

Para el académico, las principales oportunidades en este ámbito están puestas sobre el manejo de datos y la digitalización en salud, lo que permitirá que los beneficios de las innovaciones desarrolladas en Chile “se transfieran rápidamente a los pacientes. Estamos seguro que la incorporación de tecnología, y el manejo de información y de datos para la toma de decisiones en salud, tanto por parte de proveedores como de pacientes, va a tener un gran impacto”.

Carlos Núñez, asesor de interoperabilidad del comité de transformación digital de Corfo, dijo que las oportunidades de que los desarrollos tengan un mayor impacto también se relaciona con el fortalecimiento del ecosistema de innovación en el país en los últimos diez años. “La innovación es un tema bastante en boga, pero no siempre las ideas llegan finalmente a postular a eventos como el torneo CENS o los fondos de Corfo. Hoy el ecosistema tiene las variables precisas para emprender en distintos ámbitos, es mucho más agradable para atreverse a innovar. En salud, las principales oportunidades estarán enfocadas en pacientes crónicos, telemedicina, E-Health y salud en el hogar”, precisó Núñez.

Mentorías anti fracaso

Daniel Capurro agrega que otra de las barreras tiene que ver con las dificultades de acceso a un mercado de gran envergadura, donde se estima que hay alrededor de más de 300 mil aplicaciones, con más del 10% de ellas en español. “El problema es que es muy difícil acceder a ese mercado, porque a pesar de que hay muchas aplicaciones tecnológicas, es difícil sortear la barrera de validar clínicamente su efectividad”, afirma Capurro.  

De hecho, se estima que, a nivel global, un 50% de las startups de salud digital a nivel internacional fracasan antes de dos años debido a cuestiones relacionadas con el acceso a conocimiento de vanguardia y financiamiento. Para ello, el torneo de emprendimiento CENS ha establecido un programa de mentoría de seis meses, poniendo al servicio de ello a académicos de las universidades Católica, de Chile, de Valparaíso, de Talca y de Concepción (además de expertos de la industria local), además de diversos actores de la industria local de salud.

Durante este período, recibirán formación en ámbitos como modelo de negocios, procesos de interoperabilidad, estándares de intercambio de información y nuevos modelos de atención en salud. La directora del torneo, la gerenta de Proyectos de CENS, Alejandra García, explicó que el proceso de mentoría los guiará desde el origen de la idea hasta su posterior implementación en los en centros de pilotaje de hospitales públicos.

“Los mentores van a contribuir a los avances de los emprendimientos en todo su proceso de formación. Esperamos que el impacto de estos proyectos sea bastante alto, considerando la colaboración con distintas organizaciones del ecosistema, como Corfo, que son los que entregan los recursos para que estas ideas hagan un salto en su escalamiento; y Minsal con sus centros de pilotaje abiertos a recibir innovaciones para mejorar la salud”, añadió García. 

El Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud, una entidad apoyada por Corfo, es una entidad integrada por cinco universidades nacionales, de cuatro regiones, que colabora con diversos proyectos para incentivar la digitalización del sector y la formación de un ecosistema de innovación local. Entre ellos, el Registro Nacional del Cáncer y el Historial Clínico Compartido del Minsal.